¡Una Luz Imponente!

Admirando la luz del sol imponente
entre nubarrones de maldad y de lluvia,
he podido comprender que en la vida
hay muchas malas intenciones
que quieren opacar el brillo de nuestra felicidad.

Al ver el hermoso arcoíris
producto de los rayos solares entre las gotas de lluvia,
pude aprender que es necesario tomar las cosas positivas
y desechar las negativas para que podamos tener
un arcoíris que nos acerque a la felicidad,
y no dejarnos arrastrar por corrientes de aguas turbias
que sólo desembocan en ríos de maldad.

Admirando el brillo resplandeciente de luna llena,
pude comprender que por oscura que parezca la noche
siempre hay una luz que se impone ante la oscuridad.

Y, meditando acerca de los problemas,
comprendí que por grave que parezcan
siempre hay solución para ellos.

Toledo, Marlin.
23/01/10.